lunes, 30 de julio de 2012

There's a crazy little place that I know / la venganza no cumplida

La orina oprimía mi vejiga, tuve que despegarme de aquella amena conversación alcohólica que no iba a ningún lado. Camine decidida al baño de mujeres, al fondo del bar, intentando no tambalear.Para varear, hay fila, dos amigas  de faldas cortas y grandes caderas arrojaban un olor agradable a marihuana, recargue mi espalda en la  fría loza blanca, a la espera de mi turno.

Mientras escuchaba de lo bien que folla un tal Michael, mis ganas por entrar al baño aumentaban, ellas queriendo meter y yo queriendo sacar, maldecía a la cerveza aunque sabía que me tomaría tres más, por lo menos.

Estoy de frente a la puerta del baño de hombres, donde veo entrar y salir, mientras yo sigo esperando, escucho como tortura, la gris vida sexual de dos chicas de veintidos años mientras mi bajo vientre se va abultando, como una pequeña bomba con cuenta regresiva a diez segundos.

Las chicas gritan un nombre, sus lenguas raspan su paladar, haciendo el ruido interpretable a un gato hambriento, pasan algunos segundos, un hombre corpulento, con las fosas rojas y los ojos desorbitados, aparece, no parece notarme hasta que, en un movimiento rápido y violento, su mano y brazo izquierdo golpean mi pecho, siento su palma apretada en uno de mis senos, para luego abrirse paso, no sin antes darme un guiño bizco y una sonrisa lujuriosa.

Dejo mi boca abierta ante la sorpresa, queriendo salir un insulto, un grito o un lamento, ante la imposibilidad de alguno: parpadee... 

Del bar retumba los primeros acordes de The Coasters "Down in Mexico" (http://www.youtube.com/watch?v=Kahp_kmOFzQ ) sentí la cara caliente y los puños apretados por la ira, el hombre me daba la espalda, balbuceando y escupiendo enormes gotas de saliva ♫ There's a crazy little place that I know ♫ le toque la espalda, giro lentamente, con su sonrisa lujuriosa,  lo pegue a la pared, para luego apretar su entrepierna, lo miré a los ojos, mientras retorcía la columna  de dolor ♫ I said "Tell me man, when does the fun begin?" ♫ acerque a mis labios a su oído poblado de un vello grueso color marrón, le mordí el lobulo y susurré: Yo no necesito enborrachame para conseguir un pene, yo no soy tan patética, ni estoy tan desesperadamente caliente, para buscar el mínimo  contacto ante la primera señal de estrógeno... los huevos no se obtienen, se gananIn Mexico...♫

Parpadee... la música se torno tranquila, me descubrí sola, parada junto al escusado, con la respiración agitada, con el puño apretado y las uñas destrozando mi palma, la embriaguez escapo de mi cuerpo, abrí la puerta temerosa, afuera nadie me esperaba, lave mis manos, camine hasta mi mesa, le sonreí a mi mejor amigo y alcé mi  brazo para pedir otra cerveza, las ganas de ir al baño regresaron.



miércoles, 25 de julio de 2012

Un final alternativo al cuento "mi vecino Andreé"

Después de lo sucedido con mi esposo, mi hija me visitaba con menos frecuencia, cuando lo hacía, su mirada era de desconcierto, nuestras conversaciones eran cortas y el ambiente se torno incomodo, prefería estar sola, perder mi consciencia en la cortina que separaba mi locura, escuchar el constante sonar de las maquinas que conservaban con vida a Andreé.

Los doctores no paraban de decir que estaba sanando, algo lento claro pero que no me desesperará, que en poco tiempo podría salir de aquí como nueva ¿Nueva? Viviría con medicamentos, mi calidad de vida no sería el optimo, por salvarme la vida me volvieron esclava. Me quitaron todo, me quité todo, la relación con mi hija no será la misma, se desmantelo mi hipócrita unión con mi esposo, descubrí a quien realmente le preocupo y la percepción sobre mi, sobre lo que quiero y lo que he logrado me ha llevado a una de mis más grandes decepciones  y depresiones. Sí, saldré como nueva, nunca dijeron que saldría mejor de lo que entre.

Entre mi tristeza y desesperación, comencé a hablarle a la cortina, la soledad es grande ante situaciones extremas y me conforme con el consuelo de oídos ensordecidos por la enfermedad. Libere todo lo que pude, hasta quedar sin palabras, al terminar sólo encontré la respuesta de una respiración artificial. Ya era de noche.

Quite la delgada sábana, que acobijaba mi cuerpo, arranque la bata blanca; mi única ropa, acaricie mis piernas, saboree los vellos que crecieron libres y salvajes, palpe con cuidado la gran herida de mi abdomen, sentí cada puntada, cada costra, cada hendidura, sostuve mis pechos caídos por el tiempo, recordando la firmeza olvidada y mis manos con tristeza los soltaron para volver a mis pernas, las acaricie hasta calentarlas, hasta moverlas. Con movimientos lentos logre sentarme y después de un rato estaba de pie en la ventana, dándole la espalda a la cortina que ocultaba mi locura,  la luz tenue de afuera sedujo a mi cuerpo maltrecho, respire hondo y al mismo tiempo gire mi cuerpo y camine.

A cada paso, mi cuerpo se sentía más ligero, a cada paso veía caer mi pasado, ningún error o acierto me acompañaban, al acercarme a la cortina que ocultaba mi locura, un espasmo eléctrico paralizo mi andar, un miedo conocido se transformo en vergüenza, sentí la desnudez de mi alma, baje mi cabeza  y alargue mis brazos y jale con los ojos cerrados y los parpados apretados.

Jale hasta quedarme sin cortina, los parpados explotaron y mis ojos se tardaron en acostumbrar a la luz. Vi sus ojos, unos ojos cristalinos, con expresión inquieta, los vi mirarme, los vi moverse de arriba abajo, los vi y me vi, vi mi cuerpo agónico, una silueta gastada, vi en esos ojos cristalinos la peor imagen, la verdadera. 

Apreté de nuevo mis papados y caí al suelo, un gemido salió de mi garganta y lagrimas quemaron mi rostro. 

domingo, 22 de julio de 2012

Pesadilla

¿No recordarlo? Con sólo cerrar los ojos las imágenes vuelven. Ya no quiero dormir...


Sin saber donde estoy, como llegue ahí o quien era la persona que estaba frente a mí. Una luz al que llame sol me deslumbraba, de la figura que tenia enfrente  únicamente percibí un tupido bigote. Tape mis oídos sin haber escuchado algo, la luz creció y me cegó ¿O cerré mis parpados? Antes de darme de cuenta que veía de nuevo, esos grandes ojos  violetas estaban violentamente cerca, se alejo unos pasos y levanto un brazo, colocando a la altura de mi rostro el auricular de un teléfono análogo, recorrí con los ojos la gran extensión del cable que se distinguía del cuarto oscuro.


Nos quedamos así por largo rato, de pie, donde el silencio y el negro  se extendían abismalmente. Cogí  el auricular y lo puse sobre mi oreja izquierda, entre la estática se escuchó:






-De mi olor te cubrire con permiso o sin el, mi sexo se convertirá en mi única arma.- de la estática paso al sonido del cuelgue. 

Sentí el bigote moviéndose por mis pómulos, su maloliente saliva mezclándose con mi sudor, sus dientes pellizcando mi piel, su respiración calentando mi carne  y su brazo apretando mi cuello.

Círculos de luz se encendieron por todo el cuarto, parecía interminable, pequeñas mariposas revoloteaban, apareciendo y desapareciendo de las luces, viajando ligeras. Extrañas mariposas cafés con abultados cuerpos con singulares antenas, unas cuantas comenzaron a acercarse, bailando de manera torpe y grotesca ¿Mariposas? ¿MARIPOSAS?



Deje de forcejear, quede atrapada por aquel mostacho lujurioso y con los bailarines de alcantarilla a mi alrededor.

Quizás no hay un típico monstruo: un cuerpo sin forma, de colores opacos, grandes mandíbulas con enormes grupos de filosos dientes con hilos de baba saliendo de sus labios, mirada vacía de cazador y garras astilladas y manchadas de sangre. No, mi miedo es más humano, más tangible, eso es lo aterrador.

viernes, 20 de julio de 2012

Un beso sabor alcohol

Al besarte abría los ojos, al besarte veía esa enorme pared amarilla. El besarnos cerca de un elecktra no fue una buena idea, el besarte fue el ultimo error de la noche.


Tranquilo, no besas mal, pero odio el aroma de tu saliva incrustado en mis labios, la sensación de la barba de tres días en mis mejillas. La lluvia que cae ahora en mi cuerpo no logra limpiarme tú sabor, tú piel brillosa deslumbro mis corneas pero tu falta de personalidad opaco mis ganas.


Nuestro aroma a alcohol tapo nuestro deseo, lo abarato. El alcohol movió hilos, jalo bocas, choco senos, junto caderas, nos impregno de falso deleite, de falsa decisión y aun consientes de eso, seguimos con el guión  de viernes, pero en jueves.


EL único recuerdo es esa pared amarilla, brillante, sin chiste, que nos abarcaba, esa pared, ese color. Olvide tus besos, tú voz, tú olor, tus manos, tus brazos, tú cuello, tú rostro, tu nombre. Ahora odio un poco más el color amarillo, un poco más los elecktra.


martes, 17 de julio de 2012

Fragmento de un cuento sin terminar

Siento un vació, cada vez que estas cerca ese hueco se hace más grande, no sé como explicarlo, no sé si quiero explicarlo, estoy seguro que no te importa, me sorprende que sigas aquí escuchando.

Tengo esta nada desde siempre, quizás antes de que me forzarás conocerte, fue parte de mi desde el principio, pero tú haces  más grande el agujero, más profundo y más doloroso, si tú presencia me quema, el saber que estas cerca me causa nauseas pero sigues aquí, allí, allá, acá. Ya no sé si sólo estas en mi cabeza o has logrado salir aunque no te vea te siento, te huelo, te escucho.

Deambulas por mi recamara sin decir una palabra, ríes, te carcajeas y supongo que ni siquiera es por lo que te digo, esto se convirtió en un monólogo, un monólogo triste y sin sentido. Palabras que rebotan en el cuarto, que rebotan en tu cuerpo o lo que sea que tengas, rebotan infinitamente, como partículas sin vida, como tú y como yo, sin vida.

Este vació no se irá, me tragara, me tragaras, este vació es del cariño que no te tengo, es esa atracción repulsiva, ese vació por no poder matarte.

No te consumes, me consumes, no cambias y yo envejezco, no te vas y no me dejas ir...

lunes, 16 de julio de 2012

Una conversación desamorosa

-Deberías tener una lista o hacer un libro- dijo antes de sorber café.


Mientras esperaba una respuesta, mientras tomaba de esa gran tasa blanca, mientras el mesero limpiaba una mesa cercana, mientras la gente pasaba detrás de la ventana sin notar nuestra existencia, mientras los carros rugían por sus amos histéricos, mientras los segundos pasados se acumulaban, yo pensé en esa posibilidad apenas sugerida. 

-Un libro... ¿Para qué?-
-Ya sabes- vio el reloj de reojo- para llevar un control de tu vida, para recordar los hechos, has vivido relaciones amorosas muy extrañas- eso ultimo lo dijo sin mirarme.

¿Extrañas? -pensé- Nada fuera de lo ordinario, con seguridad alguien ha vivido cosas más extrañas, no encuentro razón para hacer tangibles mis recuerdos, lo que me ha pasado se irá cuando se muera mi ultima neurona, cuando los veintiún gramos desaparezcan de mi cuerpo, no quiero dejar huella de mis aciertos o errores. Convertir en números a mis pasiones sería deshumanizarme, trozos de mi placer convertidas en tinta, en grafito.

-No, es una mala idea, prefiero olvidar para cometer los mismos errores, pasar una y otra vez por la piel que me convierte en llamas y que me apaga en lagrimas. Si escribiera un libro, por el simple recordar, al momento de escribir nuestro capitulo, me alejaría de ti.-
- Dices que repetirías lo nuestro ¿O cómo?-
-Nos vemos, que esto comienza a reescribirse, llámame cuando lo olvides.-

Me vi reflejada en sus grande lentes empañados por la caliente vergüenza, le bese la frente, deje mi boleto para la función de las seis y el dinero exacto de mi latte. 

jueves, 12 de julio de 2012

Un telegrama demasiado largo para ser enviado

Una silla frente a frente a otra, una mesa de vidrio nos divide. Una botella de vodka y dos vasos vacíos. Las palabras le estorban a la conversación del silencio. Las miradas cansaron el oxigeno de aquella cocina. El calor corporal hizo sorda la lluvia externa. Su moral se diluyo entre la ebriedad. Dos rostros transformándose en ajenos. Dos cuerpos sufriendo la relativa distancia. Cuatro pies inertes por el mareo. Las ganas aumentan mientras el tiempo acaba. Se olvidaron de su pasado, de su contexto, de si mismos. Parecía que no volverían a moverse, no se plantearon volver a hacerlo. Aún siguen sin hacerlo. Nada más que miradas fijas en el otro.
************************Fin del reporte************************

lunes, 9 de julio de 2012

2009 II

Escava dentro de mi cuerpo,
de entre mis orillas sacude el polvo,
integra las penumbras del pasado,
enreda mis pecados entre mis cabellos.


Disfrútame en secreto,excreta mis deseos,
gime cuando te lo ordene, 
acomódate entre mis espacios,
empújame, besa, susurra, exhausta déjame.


Camina a mi lado, sintiendo tú mano,
explotemos con nuestras piernas entrelazadas
deja a tus labios el libre albedrío ,besa mis curvas,
humedece tu lengua en mi ombligo.


Déjame chorreante, déjame húmeda,
déjame deseosa, siempre insaciable,
con la respiración entrecortada,
déjame con las piernas tensas, a la espera.


Aléjate si lo crees necesario,
cuando se muera la ultima mariposa,
si al placer le gana la furia,
cuando tengas que forzar a la memoria.


Cuando dejes de hablar en futuro,
cuando la palabra sea hiriente,
cuando el interés se divide entre cero,
si la realidad es pesada, despídete.


Despídete, antes de que de la vuelta.


viernes, 6 de julio de 2012

2009

Sin previo aviso, caliente.
Sentada o de pie,  
se electrifica mis caderas,
se humedecen mis labios.


Con mascaras encarnadas, 
con escudos en el tórax
se engaña al tacto, 
se desdobla la piel.


Se abren las piernas,
se cierran los ojos,
se unen los labios,
un sube y baja de cuerpos.


Entra el aire, sale el gemido.
Miradas dilatadas,
explotan en sonrisas, en risas,
orgasmos iniciando el recorrido.


Posiciones  retorcidas,
diálogos no ensayados,
desgarran, se resbala.
Viajan, viene, se vienen.


Caen cuerpos, hinchados,cansados.
Cigarrillos se encienden, 
los ojos se apagan, 
los brazos se entrelazan.


La realidad regresa...